Guillermo «WillySoft» Fuenzalida (Chile) nos sorprende con una versión para cartucho Atarimax del recordado juego de rol Alternate Reality: The Dungeon (Datasoft, 1987).
El programa original ocupa cinco lados de discos flexibles, y una cara adicional para poder guardar los avances del personaje, pudiendo almacenar hasta cuatro personajes por lado adicional. El juego ocupa alrededor de 500 kbytes, una cifra bastante abultada para un computador como el Atari 8-bits -cuya CPU maneja no más de 64 kbytes.
Quienes disfrutaron del juego, recordarán que cargaba información con mucha frecuencia y obligaba al usuario a cambiar de disco constantemente; incluso, el manual original recomendaba tener cuatro disketteras disponibles a fin de reducir la cantidad de cambios de disco.
«WIllySoft» convirtió el juego completo a un solo cartridge compatible con el sistema de Atarimax. Además, su versión permite grabar hasta cuatro perfiles como si se tratara de una unidad de disco convencional Atari; por lo que no hay necesidad de utilizar un diskette adicional. De igual modo, es posible además utilizar un disco físico para almacenar los personajes creados, lo que permite una mayor flexibilidad en el uso del juego.
«Tomé el trabajo que hizo Mark «Wrathchild» Keates, quien realizó una consolidación del juego completo en un solo archivo ATR. Esto fue un puntapié inicial muy importante para realizar una conversión completa. De ahí, hice una reconversión de las rutinas de lectura de disco. Para ello, diseñé una rutina que utilizara dos disqueteras virtuales: una ‘D4:’ en que lee todos los datos del juego, y otra ‘D2:’ para utilizarse como disco de grabación de personajes”, explicó Fuenzalida a Atariteca.
“De esta manera, queda disponible ‘D1:’ para utilizarse con discos reales o ATRs, según sea el caso. Ahí tuve que ser más creativo: el flash cartridge tiene ciertas limitaciones, así que tuve que hacer una rutina completa de emulación».
Precisó que el aspecto más complicado fue que AR: The Dungeon utiliza una rutina propia de lectura de disco. «No utiliza llamadas estándar del Sistema Operativo, sino más bien llamadas directas de bajo nivel al puerto SIO. Eso hacía más complejo poder modificar las rutinas de lectura de cartridge».
Descubrió también que el juego tiene un sistema que impide utilizar más de un perfil sobre el mismo personaje. «Así te da el vértigo de que, o continúas con lo último realizado, o asumes un costo por recuperar». En este caso, podías perder un punto de cualquiera de las características del personaje del juego -que las define como Sabiduría, Carisma, Inteligencia, Agilidad, entre otras.
Además, Fuenzalida se las ingenió para desarrollar una utilidad de transferencia de disco a cartucho o viceversa para los personajes. «Creo que sería útil hacer una copia de seguridad de tu personaje en un disquete o poner tus viejos personajes en el cartucho. Esto fue muy solicitado por los usuarios del sitio AtariAge, quienes tenían muchos personajes que han desarrollado hace muchos años y querían utilizarlos con el cartridge».
Aquellos interesados en ver qué fue lo que modificó en el juego para lograr el pase a cartridge, Fuenzalida publicó el código fuente completo en su repositorio GitHub donde se encuentran disponibles la conversión del juego -que a la fecha de publicación de este artículo se encuentra en su novena versión- así como la aplicación de transferencia de personajes.
“El código fuente está listo para ser compilado con el ensamblador MADS, el cual generará una imagen de cartridge para ser ejecutada con el emulador Altirra; o bien, en conjunto con el Maxflash Studio, se puede generar un archivo ATR con la imagen lista para grabarse en un flash cart en físico”, detalló.
Para utilizar esta versión, se requiere de un cartridge flash de 1 megabyte de Atarimax; aunque también se puede grabar en una eprom, dado que se pueden utilizar discos físicos o archivos ATR.
“Recomiendo que, al generar la imagen, lo primero que hagan es crear un nuevo disco de personajes en el cartridge. De lo contrario, se puede caer el juego, dado que no encuentra dicho disco”, agregó.
Por si fuera poco, “WillySoft” diseñó las etiquetas del juego para el flash cart de Atarimax y de tamaño Atari estándar.
Respecto a la posibilidad de reproducir cartuchos flash con su versión de AR: The Dungeon, comentó que prefiere no hacerlo por lealtad a Steve Tucker, creador del Atarimax. «Sugiero que compren el flash cart a él, y así podrán grabar la imagen lista en sus Atari».
Por último, descartó la posibilidad de realizar algo similar con Alternate Reality: The City, el primer juego de esta serie, «No lo voy a tocar. La verdad, en su tiempo sólo jugaba al The Dungeon. The City es un muy buen juego para poder cultivar un personaje y que pueda desarrollar sus habilidades, aumentar su nivel, alineamiento (bueno o malvado), recopilar dinero y experiencia. Pero, según entiendo, queda sólo en eso. En cambio, The Dungeon tiene una historia con trama, hay varios misterios por descubrir y mucho por explorar. Y, además, tiene diferentes finales según cómo lo juegues. Es una experiencia de juego muy diferente.», puntualizó.
